Ejercicio físico, gran aliado para las personas con Párkinson

  • Un análisis publicado muestra que la actividad física mejora los síntomas de depresión en personas con enfermedad de Párkinson.
  • Se incluyeron 19 ensayos con un total de 1.302 pacientes.
  • El ejercicio ligero, moderado y de alta intensidad puede proporcionar beneficios emocionales.
  • Esta es una forma importante de ejercicio que se recomienda además del cardio, pero también en combinación con otros ejercicios que desarrollan fuerza, flexibilidad, equilibrio, agilidad, marcha y postura.
  • Por lo tanto, se recomienda el ejercicio como antidepresivo en pacientes con enfermedad de Parkinson.

Algunos estudios han observado que el ejercicio físico puede producir beneficio no sólo a nivel motor sino también en otros aspectos como el estado de ánimo, el sueño o la función cognitiva en pacientes con enfermedad de Párkinson. Se publica un trabajo en la revista Neurology cuyo objetivo fue proporcionar pruebas claras que respalden el uso del ejercicio para mejorar los síntomas depresivos en pacientes con enfermedad de Párkinson e investigar si este efecto difiere según el tipo y la intensidad del ejercicio.

Metodológicamente, 3 revisores independientes llevaron a cabo una búsqueda bibliográfica en PubMed y Web of Science hasta el 28 de febrero de 2022 en la que sólo incluyeron ensayos controlados aleatorizados que aplicaran intervenciones de ejercicio con síntomas depresivos como variable principal. Es decir, sólo se aceptaban ensayos en los que el objetivo era comprobar si frente a no hacer ejercicio el ejercicio mejoraba sintomatología depresiva. Se aplicó la metodología estadística adecuada para el meta-análisis.

Un total de 19 ensayos controlados aleatorizados que incluían a 1.302 pacientes con enfermedad de Parkinson fueron seleccionados y válidos para el metanálisis, incluyéndose 23 comparaciones de los estudios para la síntesis de datos.

Las intervenciones de ejercicio físico mostraron efectos significativos en la reducción de los síntomas depresivos en pacientes con enfermedad de Parkinson. En concreto, los resultados mostraron efectos positivos significativos para las intervenciones de ejercicios combinados, en cambio, el ejercicio físico aeróbico sin ningún otro tipo de ejercicio no demostró tal beneficio. Tanto la realización de ejercicio físico a intensidad ligera – como moderada – vigorosa (ejercicio de alta intensidad) demostraron producir beneficio sobre el estado de ánimo, aunque algo más si el ejercicio era de alta intensidad.

En base a los resultados de este metaanálisis, parece claro y demostrado que el ejercicio físico tiene efectos antidepresivos significativos en pacientes con enfermedad de Párkinson. Estos efectos beneficiosos parecen estar más en relación con el tipo que con la intensidad del ejercicio, recomendándose la realización de ejercicios combinados y no sólo aeróbico.

Desde el punto de vista personal y como recomendación, el ejercicio debe programarse por alguien experto con una planificación adecuada e idealmente deberían trabajarse 4 aspectos:

  • Aeróbico
  • Fuerza y Resistencia
  • Flexibilidad
  • Equilibrio, agilidad, marcha y postura.

Puedes consultar más en el siguiente enlace. Sin duda, este trabajo abala más la grandísima importancia de ejercicio físico en las enfermedades neurodegenerativas.

 

 

Diego Santos García
Servicio de Neurología, CHUAC (Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña), A Coruña
Neurología, Hospital San Rafael, A Coruña