• El estudio PARS demuestra que un test de olfato seguido, si está alterado, de un estudio de transportados de dopamina como el DATSCAN, podría servir para identificar precozmente a sujetos que desarrollarán enfermedad de Parkinson.
• En concreto, el 67% de sujetos con déficit de transportador de dopamina frente a sólo el 20% de aquellos sujetos indeterminados y el 4% de sujetos normales desarrollaron síntomas clínicos y fueron diagnosticados de enfermedad de Parkinson.
• A lo largo de un seguimiento de más de 6 años, alguno sujetos podían pasar de tener un DATSCAN normal a alterado y esto suponer un mayor riesgo de desarrollar Parkinson.
El estudio PARS (Síndrome de riesgo asociado de Parkinson) se diseñó en Estados Unidos para evaluar si la detección de hiposmia (disminución de la capacidad de oler correctamente) seguida de imágenes del transportador de dopamina (mediante la realización de un DATSCAN) puede identificar el riesgo de un sujeto de desarrollar síntomas clínicos de enfermedad de Parkinson. Se publican resultados en Movement Disorders de este estudio con seguimiento a largo plazo (> 5 años).
Los sujetos de una población estudiada con hiposmia completaron evaluaciones clínicas anuales y exploraciones cada 2 años con DATSCAN. Los sujetos se clasificaron en base al hallazgo en el estudio de DATSCAN inicial en tres grupos: 134 sujetos normales sin déficit del transportador de dopamina (más del 80% de la captación del marcador esperado por la edad en el DATSCAN); 30 sujetos indeterminados (más del 65 y hasta el 80%); 21 sujetos con déficit del transportador de dopamina (≤65%).
Durante un seguimiento medio 6.3 años, el 67% (14 pacientes) de sujetos con déficit de transportador de dopamina frente a sólo el 20% (6 sujetos) de aquellos sujetos indeterminados y el 4% (6 pacientes) de sujetos normales desarrollaron síntomas clínicos y fueron diagnosticados de enfermedad de Parkinson. A lo largo del seguimiento, un 40% de los sujetos indeterminados y un 5% de normales pasaron a presentar déficit de transportador de dopamina y además la conversión de imágenes durante el seguimiento se asoció con la conversión clínica posterior, es decir, que a lo largo del seguimiento, pasar a presentar déficit de trasportador de dopamina se asoció a una mayor probabilidad de desarrollar síntomas clínicos y de ser diagnosticado de enfermedad de Parkinson.
Coordinador del Comité Científico de la Fundación Degén, neurólogo en el Servicio de Neurología del CHUAC (Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña) y del Hospital San Rafael, A Coruña.
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